Corresponde en especial al tutor o  tutora valorar en qué medida se van alcanzando los objetivos propuestos inicialmente. Como se pretende, de manera prioritaria, tratar de reducir los conflictos producidos en el tiempo de recreo y aumentar la cohesión de grupo, de no verse cierta mejoría, será éste el momento para introducir modificaciones. Por medio de una sencilla hoja de valoración (cotejo o rúbricas) para la tutora y otra para los alumnos se pueden extraer conclusiones a priori. El objetivo es introducir de manera inmediata las mejoras oportunas.